Hola a todos. Pues sí, aquí en Zaragoza, además de calurosa pues no hemos bajado de 23º, ha sido mágica. Y mágica es porque se utiliza el ritual del fuego y la hoguera como medios para purificar todo aquéllo que está en nosotros y que deseamos eliminar. Es la fiesta del sol, la fiesta del solsticio de verano.
El refranero dice que: "Sin engaño, la noche de San Juan, la más corta del año" Error gordo, pues la noche más corta fue la del solsticio, la del sábado. Pero claro, nosotros, inmersos en la tradición judeo-cristiana, hemos traspasado una fiesta pagana de tiempos anteriores al cristianismo, al santo importante más cercano, en este caso San Juan.
En Aragón concretamente en la Ribagorza, hay una leyenda acerca de unas pequeñas hadas, llamadas lavanderas, que en la noche de San Choan, lavan sus prendas en el río, y al que encuentre alguna de esas prendas será afortunado para toda la vida.
La magia pues no se acaba con el fuego, el agua (quizás por lo de San Juan Bautista) también tiene atribuciones mágicas en esta pasada noche: quien haya dejado un balde con agua al aire libre durante toda la noche, y se haya lavado con ella por la mañana, habrá contribuido a su purificación. TOMA YA. Aunque mejor que el agua de hoy sólo la empleemos para eso y para refrescarnos pues como dice el refrán: "Agua por San Juan quita vino, aceite y pan"
Bueno saludos sudorosos a todos de nuevo desde esta Zaragoza que sin batir récords un día tras otro está siendo no sólo la capital de provincia con temperatura más alta de España, sino de Europa y de gran parte del norte de África. Pero, el verano en la Cuenca del Ebro es así...