
¡Por fin! Después de mucho tiempo deseándolo he podido cambiar de equipo.

Os presento mis nuevos juguetes, Canon EOS 50D y objetivo Canon EF-S 15-85mm f/3.5-5.6 IS USM.

Con el cuerpo no tuve muchas dudas. Una vez decidido a seguir con Canon y descartadas las FF por motivos obvios y con la 7D fuera de mi presupuesto sólo quedaban la 50D y la 60D. No dudo que la 60D sea una gran cámara pero ni el vídeo, ni la pantalla orientable son prioridades para mí, y además tanto megapixel me sobra. Prefería una cámara de fotos simple, bien hecha, grande y cómoda. Si a esto añadimos que la 50D ha quedado descatalogada y no está mal de precio la decisión fue rápida.
Deciros que la primera impresión al sacarla de su caja ha sido extraordinaria. Nada más cogerla ha relegado a mi vieja 350D a la categoría de juguete de plástico, y a su visor a la de cueva oscura. Transmite impresión de solidez, el visor es grande y luminoso, el agarre es óptimo para mí, y puedo alcanzar todos los botones sin correr el riesgo de meterme un dedo por la nariz o sacarme un ojo, como pasaba con la negrita.
Lo del objetivo fue otra cosa. Dudas, dudas y dudas... Acostumbrado al todo terreno Sigma 18-200 (QEPD) y a la comodidad de no tener que cambiar nunca de objetivo mi primera intención fue pillar otro TT semejante, el Tamron 18-270mm o el nuevo Sigma 18-250 con motor de enfoque ultrasónico. Pero pensaba que los 15 Mpx podrían sacar los colores a estos objetivos, dignos pero con limitaciones debido a su gran rango.
Por otro lado me daba cuenta de que con este tipo de objetivos andaba sobrado de zoom por el lado tele, realmente poco usaba las focales por encima de 100mm (160mm equivalente con estos sensores APS-C). Y además era consciente de que el salto en calidad que quería dar debía recaer en gran parte sobre el objetivo.
Pensé en el famoso Canon EF-S 18-85, pero entonces reparé en el relativamente nuevo Canon EF-S 15-85mm f/3.5-5.6 IS USM. Los tres milímetros de más por el lado angular me decidieron, y además pensé que el plus de calidad que prometía sobre los TT me permitiría hacer recortes dignos, con lo que obviaba la pérdida de tele.
Esta tarde en cuanto la he recibido he cargado a medias la batería y sin saber ni ponerla en marcha he salido a la calle para aprovechar los escasos minutos de luz que me quedaban haciendo unas pruebas, que os pongo aquí.

Ciertamente los 15mm se notan mucho sobre los 18mm que tenía antes.

Que no falte el detallito meteo, unas bonitas irisaciones que he podido pillar.

Unas pruebas de recorte (se me ha olvidado sacar otra foto con los 15mm para que la comparación fuera completa

). Hasta aquí llegaba el zoom

Y recortando al 100% puedo obtener ésto.

Más recortes


Una foto a ISO 800. Ruido muy comedido (por lo menos acostumbrado a lo que daba la 350D).

Y ésta a ISO 1000, con un poco de reducción de ruido queda bien, creo.

Estoy muy contento con la prueba, en cuanto me haga con la cámara pienso que me puede dar muchas alegrías. Ahora espero ansioso que llegue algo interesante meteorológicamente hablando y ver hasta donde puedo llegar con este equipo.

Una única pena, pensaba vender la 350D con el sigma 18-200 y sacarme unos pocos lereles que me ayudaran a comprar un gran angular 10-20 y completar así el equipo (el tele vendría después, no es prioritario para mí), pero el fallecimiento del objetivo me ha chafado los planes. Ahora sólo tengo el 18-55 plasticoso y sin estabilizar del kit para montar en este cuerpo, y no sé yo si esta combinación es muy atrayente...
Perdonad el tocho, pero es que estoy entusiasmado como un niño en navidad.