Buenos días,
No puedo estar más de acuerdo con virazón y benig. Comparto totalmente vuestras reflexiones de lo que llevamos de enero. Las percepciones de cada persona en lo referente a la meteorología son de las cosas más subjetivas que existen. Para 2 personas que viven en la misma ubicación y por tanto han experimentado las mismas condiciones meteorológicas, pueden haber sentido sensaciones radicalmente opuestas si les preguntas cómo consideran que ha sido este enero en lo meteorológico. Pero la realidad es una y es objetiva cuando hablamos de parámetros físicos medibles. Si la media de temperaturas diaria está siendo muy contenida en todos aquellos sitios donde ha helado una gran parte de los días de enero y donde las temperaturas máximas no se han disparado salvo los primeros días de enero de momento, podremos decir sin temor a equivocarnos que está siendo un enero de libro termométricamente hablando en todos esos lugares donde las heladas han sido pertinaces. Y en aquellos donde las heladas les han sido esquivas por su ubicación geográfica pues la realidad objetiva habrá sido otra en cuanto a temperaturas me refiero. En cuanto a precipitaciones no podemos pedir milagros en enero que no es un mes pluviometricamente hablando especialmente generoso en nuestra ubicación. En el momento en que vienen mal dadas con el anticiclón bien asentado en nuestra posición se dan estos eneros extremadamente secos. Seguro que benig que es un pozo de sabiduría en lo referente a memoria meteorológica encuentra algún que otro enero en nuestro territorio con características muy similares a este.
Cuando las condiciones meteorológicas me resultan insulsas por la falta de movimiento recuerdo eventos pasados radicalmente opuestos para divertirme un poco. ¿os acordáis justo por estas fechas en 1996 qué situación tan diferente teníamos? Pues aquello que se dio en enero de 1996 fue menos normal en nuestra ubicación que lo que estamos viviendo actualmente en este enero extraseco. Se dieron las nevadas más potentes que se recuerdan en el sistema central y en Sierra Nevada no se quedaron cojos tampoco. Hablamos de varios metros de nieve en el Puerto de Navacerrada con aproximadamente 600 mm de precipitación en ese enero, casi todos ellos en forma de nieve en esa ubicación. Pongo simplemente un mapa del 28 de enero de 1996, pero podría poner muchos otros de otros días porque se dieron una sucesión de frentes con temperaturas bastante contenidas a 850 hPa que provocaron precipitaciones pertinaces de nieve en cotas de unos 1500 metros hacia arriba. Evidentemente a nivel poblacional no se vivieron grandes episodios nivosos ese enero, pero si que las sensaciones térmicas fueron de pleno invierno con tanta humedad, viento y temperaturas muy contenidas.
Saludos.
Como ya comentamos en varias ocasiones, uno de los eneros más anticiclónicos y secos fue Ene92. Buenas heladas.
Y otro de los más secos fue Ene83.
En Zaragoza se recogieron 0,0 mm de precipitación entonces. Tampoco fue un enero especialmente frío.
Nada hacia presagiar lo que ocurriría en febrero.
Ese fue el primer gran temporal de nieve del que tengo recuerdo. Una ola de frío inolvidable para aquellos que crecimos a orillas del mar Cantábrico (afectó a toda la Península y Baleares).
Este año no sabemos que puede deparar febrero el loco, así que por mi parte aún mantengo la expectativa de vivir algún episodio interesante.
Enero el secorro y helador prácticamente ya es historia.
Saludos.
Aquel Febrero de 1983 por mi situación geográfica y concretamente Oviedo, fué como para los del centro, Filomena. Recuerdo una semana permanente de nieve y unos acúmulos cercanos al medio metro en la misma ciudad, a poco mas de 200 m, en parálisis permanente. Despues vinieron las heladas...
Va a hacer ahora 39 años y no he vivido aquí nada parecido. Lo que está claro es que no me imaginaba por aquel entonces que se tendrían que alinear todos los astros del firmamento para que tales órdagos sucedieran.
No sé si con el vaivén climatico actual entraremos en periodo de retorno, pero despues de la "Filo" esta demostrado que incluso en nuestra posición geográfica, soñar es posible.
Yo realmente viendo los modelos actualmente, no concibo esa posible alineación para bingo, pero quien sabe, tal vez el fin de semana den un vuelco, y empiecen a mostrarnos cosas interesantes.
Gracias por vuestros sesudos análisis y no dejéis de otear desde la jarcia mayor....
Buenas,
Aquello fue apoteósico en cuanto a nieve en Asturias.
Después vendrían Ene85 y Ene87(mucho mas corto pero también intenso especialmente por el occidente).
Por eso nuestra mente tierna rápidamente asociaba una buena nevada a nivel de mar a la frecuencia de dos o tres inviernos...que equivocados estábamos!
Llegó el 88, el 89...los 90 y hubo inviernos que no cayó ni una rosadina en Mofrechu, que no pasaba de una farinada en la boina del pico Pienzu u otros muchos en los que había que esperar a primavera para que cargara bien en Picos.
Empezamos a conocer que era el cambio climático.
En los 00 volvieron los temporales de nieve, pero ninguno como Feb83 y Ene85.
¿Es posible otro episodio como Feb83?.
Mi respuesta es que si. Los períodos de retorno serán probablemente largos pero la posibilidad existe.
Los desalojos brutos de masa ártica siguen dándose y siguen alcanzando latitudes medias, como no.
Es cierto que las nevadas asociadas a Filomena se dieron en áreas de interior y las isotermas que penetraron no fueron tan bajas, pero hay que remontarse décadas para encontrar algo similar, y si la famosa Bestia del Este nos alcanza con alegría aquellos días de finales de febrero de 2018, con la B Atlántica pasando al mediterráneo, ahora estaríamos recordando otro episodio de órdago a la grande.
Por tanto, las configuraciones agresivas para nevadas fuertes aún se dán y se darán, a pesar de que no podemos cerrar los ojos ante el incremento continuo de los episodios anormalmente cálidos, tanto en verano como en invierno como estas Navidades.
Saludos.