Se ha calmado bastante la actividad que en las últimas 48 horas ha provocado numerosos seísmos entre 3.5 y 4.7. Parece que el magma ha dejado de empujar con tanta fuerza, probablemente ha dejado de fracturar y entramos en una fase de calma o finalización, ya veremos. Espero que no sea la calma que precede a la tempestad. Continúan, no obstante, los movimientos y se mantiene la elevación del terreno sin señal de tremor.