No vendria mal añadir a Asturias
La sequía afecta a los embalses asturianos, que caen al 68 por ciento de su capacidadLa reserva hidráulica del Principado desciende del primer al tercer puesto de España en dos semanas.Meteorología no prevé lluvias hasta el jueves
La ausencia de lluvias que afecta al Principado se ha dejado notar ya en las reservas hidráulicas de la región, que han caído un 4,5 por ciento desde el pasado 1 de noviembre. Los embalses asturianos se encuentran al 68,4 por ciento de su capacidad, según los datos facilitados por el Ministerio de Medio Ambiente.
Así, mientras que a principios de mes los pantanos de Asturias y Cantabria -que ya ha anunciado restricciones si la sequía se prolonga- eran los más llenos de España, al 72,9 por ciento de su capacidad, actualmente, la cuenca Norte II, que integra los pantanos de las dos regiones, se encuentra por detrás de las reservas de la costa gallega, que está al 71,8 por ciento, y de la cuenca Norte I (interior de Galicia y norte de León), al 70,6 por ciento.
Por debajo del Principado se sitúan las cuencas del Duero (al 59,6 por ciento de su capacidad), las cuencas internas de Cataluña (54,1 por ciento), la que agrupa a Castilla-La Mancha y Extremadura, al 51,7 por ciento, la del Tajo (48,9 por ciento), el Ebro (48,1 por ciento), las cuencas internas del País Vasco (al 47,6 por ciento), la Norte III (46,5 por ciento), la cuenca atlántica de Andalucía (42 por ciento), la del Guadalquivir (34 por ciento) y la del Mediterráneo andaluz, al 25,3 por ciento de su capacidad. Las reservas más exiguas son la de la cuenca del Segura (al 9,5 por ciento) y la del Júcar (al 12,2 por ciento).
Actualmente, la reserva hidráulica española está al 46,7 por ciento de su capacidad. En las presas españolas hay 25.276 hectómetros cúbicos de agua embalsada, lo que representa un aumento de 950 hectómetros, el 1,8 por ciento, con respecto a los niveles de la semana anterior.
Este incremento, señala el Ministerio de Medio Ambiente, se debe a las abundantes lluvias registradas en los últimos días en toda la Península. En algunas ciudades como Cáceres se llegaron a recoger, según Medio Ambiente, hasta 137,2 litros por metro cuadrado.
La recuperación de las reservas en el conjunto del país contrasta con el descenso de las del Principado. Los embalses de Asturias guardan 379 hectómetros cúbicos de agua, sólo 42 más que la media de la última década, que ha sido de 337 hectómetros cúbicos, mientras que la del año anterior fue de 333 hectómetros, cuatro puntos por encima de la media nacional. La capacidad total de los embalses asturianos es de 554 hectómetros.
El agua embalsada ha descendido casi hasta los niveles de finales de septiembre, cuando los efectos colaterales del ciclón «Gordon» dejaron las últimas precipitaciones abundantes en la región y fuertes rachas de viento que, en la zona de Cabo Busto, en el concejo de Valdés, alcanzaron los 86 kilómetros por hora.
Las lluvias más copiosas coincidieron con el día grande de la festividad de San Mateo, en el que llegaron a caer 74,4 litros por metro cuadrado, la mayor cantidad de agua registrada en el Principado en los últimos 23 años.
Desde entonces, las precipitaciones han sido tan escasas en Asturias aún no se ha producido la recuperación de los embalses, que, tras el tradicional descenso del verano, comienzan a llenarse a finales de septiembre o principios de octubre.
En nivel de las precipitaciones en el Principado ha bajado ligeramente el últimos año según el informe hidrológico del Instituto Nacional de Meteorología (INM), que señala que el litoral occidental de la región ha registrado el descenso más notable.
El informe destaca que en Oviedo cayeron, entre septiembre de 2005 y septiembre de 2006, alrededor de 970 litros por metro cuadrado, lo que supone la media habitual en el Principado, mientras que en Valdés las lluvias disminuyeron un 25 por ciento respecto al año anterior.
Las temperaturas registradas ayer tampoco son frecuentes en esta época del año en la región. En Gijón, los termómetros marcaron 18,8 grados centígrados, frente a los diecisiete grados y medio de Oviedo y Avilés. Se mantiene así la tendencia de los pasados meses de julio, agosto y septiembre en el Principado.
En ese trimestre sólo unas pocas áreas del país se clasificaron como zonas en las que los valores fueron extremadamente cálidos: las comunidades de la cornisa cantábrica -entre ellas, Asturias-, Cataluña, algunos puntos del centro y suroeste de la Península y las islas Canarias más orientales. Atendiendo a los mapas del Instituto Nacional de Meteorología, el Principado contó incluso durante julio, agosto y septiembre con un tiempo más caluroso que algunas áreas de Extremadura, Castilla y León, Andalucía o la costa levantina. Además, según el INM, el octubre pasado -con un temperatura media de 16,4 grados, casi dos por encima de la media habitual, al igual que en lo que va de noviembre, con una media de 14- fue el más caluroso de los últimos quince años junto con el de 2001.
Esta bonanza climatológica se podría prolongar hasta los primeros días de diciembre, según los meteorólogos, que explican que la situación tiene su explicación en la permanencia de vientos de componente Sur.
Los valores registrados este domingo dejaron en las playas de la región inusuales estampas veraniegas en noviembre: los arenales se llenaron de decenas de personas dispuestas a aprovechar el sol que lució durante toda la mañana. En el arenal avilesino de Salinas y en el gijonés de San Lorenzo, así como en muchos del Oriente y del Occidente, se pudieron contemplar escenas formadas por grupos de gente paseando, haciendo deporte y tomando el sol. Incluso hubo quien se atrevió a darse un baño en las aguas del Cantábrico.
La Oficina Provincial del INM prevé que la ausencia de lluvias en el Principado se prolongue al menos hasta el jueves.
Artículo de La Nueva España