Qué bien te lo pasas labardena. Buenos apuntes altimétricos los de la pala de San Miguel.
Estos días en en pueblo, en los Juarros burgaleses, hemos aprovechado para ir al monte con las tijeras a podar un poco las encinas y quejigos repoblados, y de paso eliminar bolsones de procesionaria de los pinos, también parte de la misma repoblación. (imágenes tomadas el domingo 11, día de madrugada gélida en el interior de Spain)
Daños invernales, unos cuantos pinos tenían helada la guía terminal, como éste:
El año pasado estuvimos eliminando bolsones, pero este año parece haber más cantidad. Aquí uno abierto sobre un P. nigra (en la repoblación hay también pinaster y sylvestris, pero la procesionaria tiene querencia por los nigra)
Un ejemplo de bolsón gordo (casi un Frodo Bolsón), con la Demanda blanqueando al fondo
El mismo bolsón después de recibir nuestro "tratamiento". Cuando los bolsones se localizan en ramas laterales cortamos directamente la rama, la retiramos y rompemos la bolsa. Cuando el bolsón está en la guía, en la mayoría de las ocasiones en este caso, simplemente abríamos la bolsa confiando en que la helada de la noche siguiente terminará el trabajo.
Ya finalizando el invierno, las orugas abandonan la protección del bolsón para enterrarse bajo el pinar. La campaña invernal siguiente, emergen y configuran de nuevo los bolsones, desde los que salen cada día a defoliar el pino (los había bien sequitos). Por supuesto, no eliminamos la totalidad de la plaga, hay muchos bolsones, pero intentamos controlarla un poco, que no se dispare, aunque este invierno está siendo por sí solo un buen medio de contención. Los últimos inviernos habían sido, por contra, nefastos de cara a la contención de plagas, de ahí que luego nos topáramos con invasiones de topillos, de garrapatillo, de taladros.... aunque muchos paisanos le seguían echando la culpa a las ínclitas "sueltas de bichos del ICONA"
Por cierto, las encinas y los quejigos tienen buen aspecto, nos han quedado muy majas. En este caso, retiramos ramas superfluas y chupones, pero respetamos bastante los brotes de cepa, que haya variedad de fustes, y así puedan servir de refugio a mayor diversidad de aves y micromamíferos, o al menos esa es la intención. En esta repoblación hay incluso enebros en una ladera unmbriosa de suelo somero, pobre, y rocoso, a éstos no los tocamos, aunque no parece que estén tirando mucho. Además los "repobladores" tuvieron en cuenta el dejar zonas despejadas, pues los claros son importantes también para la fauna, no todo ha de ser bosque tupido, hay que propiciar variedad de ecosistemas.
Algunos pinos ya tienen 2 m de alto, con crecimientos rondando 50 cm el año anterior y el presente (benditas primaveras), mientras que las zonas de fagáceas están engrosando ramajes y creciendo más lentamente, como les corresponde, pero tirando bien. Tenemos fundadas esperanzas de andar por bosques racionales dentro de unos pocos años en esta zona tan castigada por el pastoreo ovino durante siglos. Saludos