Hallaron en el Caribe un ejemplar congelado de 20 millones de años de antigüedad dentro de un trozo de ámbar. Tiene sangre y podría ser estudiado.
Descubrieron en el Caribe una araña congelada de 20 millones de años de antigüedad, que además tiene algunas gotas de sangre dentro del trozo de ámbar en el que se halló.
Esto traería importantes claves del pasado de la Tierra, y la Argentina podría aportar datos complementarios para terminar de dilucidar la trama, pues la parienta viva más cercana de la vieja araña sólo existe en el país y en Brasil.
El hallazgo de la anterior araña fosilizada desconocida apareció en resina de árbol y ámbar, lo que inmediatamente refiere al misterioso origen del Parque Jurásico, la obra literaria y posterior filme que presenta la resurrección de los dinosaurios gracias a un mosquito de entonces, que guardaba el valioso ADN de esas bestias en la sangre que les había succionado y llevaba consigo.
Menos extendido el desarrollo en la realidad, por ahora el paleontólogo David Penney, citado por National Geographic, dice que la nueva araña representa el primer fósil que trae rastros de sangre, y eso no es menor. Penney, de la Universidad de Manchester en Inglaterra, añade que es posible extraer el ADN de la sangre de la araña extinta. El fósil fue encontrado en una mina de ámbar de República Dominicana, en la isla Hispaniola.
"Es la primera vez que hay registro de un fósil de araña de la familia Filistatidae," afirma. "¡Nadie vio esto antes!".
Según informa la cadena científica, la pequeña araña sólo tiene un pariente vivo hoy en día, el más cercano posible. Este pequeño descendiente de la araña en ámbar sólo se encuentra en la Argentina y en Brasil.
"El hecho de que este especimen tenga su más cercano pariente en Brasil y Argentina añade peso al argumento", explica el científico.
Los fósiles dominicanos sugieren que hubo relativamente pocos cambios climáticos y de hábitat en la zona desde la época de los dinosaurios.
"República Dominicana es el único lugar de la Tierra donde la fauna en ámbar es casi idéntica a la más reciente", añade.
Las gotas de sangre visibles en el fósil están en un trozo de ámbar de cuatro centímetros de largo por dos de ancho, y su análisis ayudará en primera instancia a determinar cómo murió la araña, explica National Geographic.
Por el flujo de sangre, dice Penney, debe haberse quedado pegada a resina de árbol y luego se le pueden haber quebrado las patas en las partes más pequeñas, pues de hecho las arañas son predadores que escapan de otros perdiendo patas.
Lo que resta es que extraigan ADN de la sangre preservada en ámbar y que se pueda utilizar esa secuencia para animales extintos. Los expertos oscilan en sus opiniones.
Científicos del Museo de Historia y Ciencias de Londres recientemente intentaron replicar experimentos de investigadores que decían haber extraido ADN de fósiles de ámbar. Estos intentos fracasaron hasta ahora, pues las muestras son muy pequeñas y antiguas.
El experto en ADN del Museo, Jeremy Austin, dijo según National Geographic
que "muchos científicos ahora creen que el ADN no logra sobrevivir fosilizado en insectos", pero puede ocurrir si la muestra fuera eficaz. Luego, extraer ADN de los saurios es sólo una cuestión de tiempo y de suerte en los hallazgos a la que la ciencia se acerca poco a poco.
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