Ayer sábado estuve por la zona de la alta montaña de Panticosa. Esta vez me decidí por subir hasta los Ibones Azules, aunque ascendí algo más hasta un punto en donde se puede observar bien el glaciar de los Infiernos, para así comprobar la innivación de este pequeño glaciar. Lo ideal hubiera sido subir hasta la cima del Tebarray, pero había riesgo de que se produjesen fuertes tormentas, y suelo ser muy conservador en este aspecto. Así que, como no empecé demasiado pronto a caminar, una vez visto la zona del glaciar de los Infiernos, y viendo como hacía el sur había nubes de evolución con bastante desarrollo, decidí darme la vuelta. Seguramente me hubiese dado tiempo de alcanzar la cima sin que me pillará la tormenta, aunque con estas prefiero no arriesgar. A la vuelta, entre Jaca y Puente la Reina, me comí de lleno una tormenta bastante intensa, acompañada de granizo y con fuertes rachas de viento (algunos coches en el arcén de la autopista). La jornada transcurrió con nubosidad abundante, viento moderado de componente sur, y temperaturas cálidas pero no excesivamente altas. Para que os hagáis una idea, sobre las 12:30 de la mañana el termómetro digital que llevaba colgado en la mochila marcaba unos frescos 11,9ºC a 2380 m. Innivación deficitaría para la época del año, aunque no la calificaría como desastrosa tampoco. Los neveros aparecen a partir de unos 2200 m, a los cuales le ha venido muy bien la última semana de temperaturas frescas, ya que estaban duros y compactos.
Las fotos
Pico Foratulas (2588 m)
Cuesta del Fraile
Refugio de Bachimaña, a 2200 m, situado a 2200 m en una zona muy ventilada, lo que le hace tener máximas muy suaves en verano.
Piedrafita (2952 m)
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