Tenemos una borrasca pequeña, pero con bastante humedad, que riega sobretodo el noroeste, Galicia. Mañana martes el Azoreño ya enseña el morro de 1020, suficiente, a falta de frentes, para que las lluvias se alejen.
Los demás días estará incierto ya que por un lado hay una tendencia a que se formen altas presiones, inconsistentes, y bajas noroestes que intentan entrar pero se frenan o resbalan hacia el norte.
El azoreño, muy estirado, y por lo tanto débil, se une con el continental europeo, algo más consistente. Esto por ahora significará que el jet, ahora en nuestras latitudes, se meandrizará un poco hacia el norte, y volverá a bajar, quizás, atrayendo de nuevo algo de humedad atlántica. Es decir, alguna borrasca se profundizará en el Atlántico provocando la aparición de lluvias que podrían descargar en el noroeste y algo de mar de fondo a las costas oestes incluída Canarias.
A nivel de presiones, el groenlandés sigue en su sitio, si bien más débil, quizás haciendo que baje la linea de fuerza norte del jet, aunque esto no lo acabo de ver claro.
En Norteamérica no hay un anticiclón continental fuerte, más bien lo hay en el Pacífico. Este cambio, grande, no sabemos tampoco hasta qué punto altera o no el equilibrio de presiones en estos meridianos, pero lo cierto es que el azoreño está debilitado, estirado, y poco macizo. Quizás tenga algo que ver.
El Siberiano está un poco subido hacia el norte y muy cambiante. Por tanto, el único persistente es el pacífico oriental, aunque sus cimas apenas llegan a los 1030.
Los contínuos frentes que riegan la costa oeste canadiense y estadounidense, o no llegan, o llegan frenados. Esto delata que hay un cambio general, primaveral, en el intercambio global de masas al disiparse las neveras del frío invernal y aparecer el calor subtropical, que hace que el jet esté bastante deslabazado en todo el hemisferio norte.
Muchas cambios rápidos de tiempo y mucha meandrización o parón de vectores potentes de movimiento de energía de largo alcance y duración.