Resumen climático del invierno de 2017-2018 Temperaturas El invierno 2017-2018 (periodo comprendido entre el 1 de diciembre de 2017 y el 28 de
febrero de 2018) ha tenido en conjunto un carácter normal, aunque muy próximo a frío,
con una temperatura media de 7,6 ºC, valor que queda 0,3 ºC por debajo de la media
de esta estación (período de referencia 1981-2010). Se ha tratado del vigésimo séptimo
invierno más frío desde 1965 y el séptimo más frío desde el comienzo del siglo XXI.
El invierno resultó normal o algo cálido en el centro de Aragón, sur de Cataluña,
Comunidad Valenciana y Región de Murcia, mientras que predominó el carácter frío o
muy frío en el resto del territorio peninsular. En Baleares el invierno fue frío, mientras
que en Canarias resultó entre frío y muy frío. Las anomalías térmicas se situaron en
valores próximos a 0 ºC en la mayor parte del tercio este peninsular, predominando
valores comprendidos entre 0 y -1 ºC en el resto de la península, llegando a registrarse
anomalías cercanas a -2 ºC en puntos de Andalucía y sur de Castilla-La Mancha y
Extremadura. En las islas Baleares las anomalías se situaron entre 0 y -1 ºC, mientras
que en Canarias predominaron anomalías próximas a -1 ºC, llegando a ser de -2 ºC en
zonas altas.
El
invierno comenzó con un mes de diciembre frío, con una temperatura media que se
situó 0,4 ºC por debajo de la normal del mes. Enero resultó cálido, con una temperatura
media 1,1 ºC superior a la normal. El mes de febrero tuvo en conjunto un carácter muy
frío, quedando 1,6 ºC por debajo de la media de este mes, siendo el sexto febrero más
frío desde 1965 y el tercero más frío en lo que llevamos de siglo XXI, por detrás de los
meses de febrero de 2005 y 2012.
Diciembre tuvo un carácter muy frío en amplias zonas de Andalucía, este de CastillaLa
Mancha, Cataluña, Aragón y Navarra, mientras que en el resto del territorio
peninsular resultó frío o normal. Tanto en el archipiélago balear como en el canario el
mes fue entre frío y muy frío. Se observaron anomalías cercanas a -2 ºC en puntos del
centro y este de Andalucía, sureste de Castilla-La Mancha, interior de Cataluña y norte
de Aragón y de Navarra, mientras que en el resto de la península ibérica las anomalías
se situaron predominantemente entre -1 y 0 ºC. En Baleares y en Canarias las
anomalías térmicas estuvieron próximas a -1 ºC.
Enero tuvo un carácter muy cálido en el tercio oriental de la península ibérica y en
Baleares, y cálido en amplias zonas del Cantábrico y de la mitad norte de la meseta
norte. En cambio, resultó frío o muy frío en gran parte de Andalucía y en puntos de
Extremadura, Castilla-La Mancha y sur de Castilla y León. En Canarias enero resultó
predominantemente frío. Se observaron anomalías cercanas a +2 ºC en amplias zonas
de Aragón, Cataluña y Comunidad Valenciana. En Galicia, regiones cantábricas, mitad
norte de Castilla y León, este de Castilla-La Mancha, Región de Murcia y Baleares
predominaron anomalías próximas a +1 ºC. En el resto del territorio peninsular español
las anomalías se situaron mayoritariamente alrededor de 0 ºC, alcanzando valores
cercanos a -1 ºC en puntos de Andalucía y de Extremadura. En Canarias las anomalías
térmicas se situaron entre 0 y -1 ºC.
En
febrero predominó el carácter muy frío tanto en el territorio peninsular español como
en los archipiélagos balear y canario. Se observaron anomalías de temperatura
cercanas a -3 ºC en la mayor parte de la cordillera Cantábrica, norte del País Vasco y
Navarra, Pirineo Catalán, sur de Castilla y León, sur de Aragón y en puntos de la mitad
este de Castilla-La Mancha y del interior de Andalucía. En el resto del territorio
peninsular español y en Baleares predominaron anomalías de entre -1 y -2 ºC. En
Canarias las anomalías térmicas alcanzaron valores de - 3 ºC en zonas altas y de entre
-1 y -2 ºC en las zonas de menor altitud.
Episodios más destacados Durante el invierno fueron frecuentes los episodios fríos, destacando los siguientes: el
de los días 1-7 de diciembre, el que se extendió entre los días 6-15 de enero y, en
febrero, los de los días 1-14 y 21-28. Los valores más bajos registrados en observatorios
principales correspondieron a Molina de Aragón, donde se registraron -12,8 ºC el 8 de
febrero, Ávila, con -11,4 ºC el 9 de enero, Teruel, con -11,0 ºC el 8 de febrero, y el puerto
de Navacerrada, donde se midieron -10,5 ºC también el 8 de febrero. Las heladas fueron
frecuentes en ambas mesetas y en zonas de montaña a lo largo de todo el invierno,
destacando los 69 días de helada registrados en el puerto de Navacerrada, los 67 días
de helada de Molina de Aragón y los 63 de Salamanca/aeropuerto.
Las temperaturas más elevadas del trimestre se registraron en los episodios cálidos de
enero que se extendieron entre los días 1-4 y 21-22, respectivamente, destacando entre
observatorios principales los 28,1 ºC de Tenerife Sur/aeropuerto del 2 de enero, los 26,6
ºC registrados en Valencia del 22 de enero, los 26,4 ºC de Lanzarote/aeropuerto del día
2, y los 26,0 ºC de Murcia registrados el día 22 de enero.
Precipitaciones El invierno ha sido en su conjunto húmedo, con una precipitación media sobre España
de 202 mm, valor que queda un 2% por encima del valor medio del trimestre según el
periodo de referencia 1981-2010. El trimestre comenzó con un mes de diciembre
normal, y fue seguido de un enero y un febrero húmedos.
El invierno ha sido muy húmedo en las regiones cantábricas, Navarra, La Rioja, y en
algunas zonas del norte de Cataluña y de Baleares, así como en pequeñas áreas de las
provincias de Segovia, Albacete y Alicante, llegando a ser extremadamente húmedo en
zonas al norte de Asturias, Cantabria, País Vasco y Navarra. La zona con menor
precipitación fue Almería donde el mes fue muy seco.
Como se puede apreciar en el mapa que se adjunta, las precipitaciones fueron
superiores a los valores normales en gran parte del tercio norte peninsular y de la zona
centro, sur de la comunidad valenciana, norte de Murcia, Baleares y algunas zonas de
Canarias. Se superaron en un 50% los valores normales en un área que abarca desde
el oeste de Asturias hasta Navarra, La Rioja y oeste de la provincia de Zaragoza; en
otra que incluye el Pirineo central y provincias de Lleida y Barcelona; en puntos de las
provincias de Albacete y Alicante; y en la mitad este de Baleares, y norte de Tenerife y
Gran Canaria. Destacan el norte del País Vasco y de Cantabria, por haberse superado
el doble de los valores normales. Por el contrario las precipitaciones no alcanzaron el
75% del valor normal al noroeste de Castilla y León, Extremadura, gran parte de
Andalucía, este de Gerona, norte de la comunidad valenciana, y algunas zonas de
Murcia y Teruel, siendo en Almería y litoral de Málaga y Granada donde las
precipitaciones no superaron la mitad de los valores normales.
Se inició el trimestre de invierno con un mes de diciembre cuya precipitación en conjunto
quedó un 21% por debajo del valor normal, en enero aumentaron las precipitaciones
que fueron iguales al valor normal, y en febrero continuaron en aumento superándose
el valor normal del mes en un 38%.
En
diciembre la distribución espacial de las precipitaciones fue muy desigual. Las
precipitaciones superaron los valores normales en la franja norte peninsular desde
Galicia hasta el Pirineo de Lleida, en Menorca y en algunos puntos de la provincia de
Granada y del este de Castilla-La Mancha, llegándose a duplicar los valores normales
en un área que abarca el norte de Cantabria y el noroeste del País Vasco. Por el
contrario, no se alcanzó ni la mitad de los valores normales, en gran parte de Andalucía,
centro y sur de Aragón, norte de Extremadura, diversas zonas de las provincias de
Palencia, Toledo y Madrid, isla de Ibiza y sur de Canarias, así como en amplias zonas
de la vertiente mediterránea desde Cataluña hasta Almería, donde las precipitaciones
resultaron inferiores al 25% del valor normal.
En
Enero las precipitaciones fueron superiores a los valores normales en extensas
áreas de la mitad este peninsular, sureste de Castilla y León, Asturias, algunas zonas
de Galicia y de la provincia de Sevilla, este de Baleares y norte de Canarias. Se
duplicaron los valores normales en un área que comprende gran parte de Navarra, País
Vasco, La Rioja y oeste de la provincia de Zaragoza; en otra que abarca la provincia de
Alicante y parte de Murcia y Albacete; y en pequeñas áreas al noroeste de Segovia,
norte de Barcelona, este de Baleares y norte de Canarias. Por el contrario, las
precipitaciones no alcanzaron ni la mitad de los valores normales en extensas áreas al
noroeste de Castilla y León y de Galicia, Extremadura, Andalucía, Gerona, litoral de
Tarragona y Castellón, oeste de Mallorca y gran parte de Canarias occidental.
En
Febrero las precipitaciones fueron superiores a los valores normales en gran parte
de España, destacando por superar el doble del valor normal, las regiones cantábricas
y Cataluña, la zona centro de Castilla-La Mancha y el sur de Madrid, así como Baleares
y diversas áreas de Canarias y del nordeste de Andalucía. En gran parte de las
provincias de Barcelona y Lleida, al este de las islas de Mallorca e Ibiza, y en algunos
puntos de las islas de Gran Canaria y Tenerife, se triplicaron los valores normales. Por
el contrario, las precipitaciones no alcanzaron el 75% de los valores normales en la
mitad sur de Andalucía y de Murcia, en extensas zonas de las provincias de Badajoz y
León, y al sureste de Galicia. En un área entre Murcia y Almería las precipitaciones no
alcanzaron ni la mitad de los valores normales.
Episodios más destacados A lo largo del trimestre de invierno 2017-2018 destacan los siguientes episodios.
Durante el mes de diciembre el episodio de los días 10 y 11 al paso de la borrasca Ana
que afectó a todo el territorio incluyendo Canarias y registrándose el día 10
precipitaciones diarias superiores a 100 mm en extensas áreas de Galicia y Pirineo
oscense, y el episodio de los días 26 a 28 al paso de la borrasca Bruno, que afectó a
gran parte del área peninsular y a Baleares, con precipitaciones intensas desde Galicia
hasta Navarra. Durante el mes de enero los días 6 al 9 en que las precipitaciones se
extendieron a todo el territorio siendo más intensas en un sector que abarca desde el
Sistema Central hasta Navarra y País Vasco, y produciéndose muchas de ellas en forma
de nieve; los días 10 y 11 en que las precipitaciones vuelven a extenderse a gran parte
de la península afectando con mayor intensidad al País Vasco; y los días 27 y 28 con
precipitaciones intensas en el sureste peninsular y Baleares. Durante el mes de febrero
el episodio de los días 1 al 5 que afectó principalmente a las regiones cantábricas y a
Cataluña, no obstante, también se registraron precipitaciones en el interior peninsular,
vertiente mediterránea y Baleares, y en muchas ocasiones fueron en forma de nieve; el
de los días 14 al 16 en el que las precipitaciones más intensas fueron al oeste de Galicia;
y los días 23 y 25 en que se producen intensas precipitaciones en Canarias. En los dos
últimos días del mes de febrero la entrada de la borrasca Emma por el suroeste iniciaba
un episodio de precipitaciones intensas en el cuadrante suroeste peninsular y en
Canarias, que posteriormente afectó a toda España con nevadas en extensas áreas de
la mitad norte peninsular.
El valor más elevado de precipitación máxima diaria registrado en este invierno en un
observatorio principal fue de 104 mm en Santiago de Compostela/aeropuerto el día 10
de diciembre, seguido de 94 mm en Vigo/aeropuerto ese mismo día y de 74 mm en
Huelva/Ronda este, el día 28 de febrero. Y en cuanto a precipitación acumulada en el
trimestre invernal destaca San Sebastián/Igueldo con 821 mm, por ser la más alta de la
correspondiente serie desde 1928, siendo el anterior valor de 812 mm registrados en el
invierno 1930-1931. En varios observatorios, buena parte de la precipitación del invierno
fue en forma de nieve, destacando los registros de 41 días de nieve en el Puerto
Navacerrada, 31 en Soria, 28 en Molina de Aragón, 26 en Burgos/aeropuerto y 21 en
Segovia.