Bien, la situación actual parece marcada por la "dana errante" que se va a pasear por la Península durante los próximos días para terminar, ayudada por el anticiclón Británico, enviando vientos de levante e inestabilidad a la zona mediterránea y sur, principalmente.
Luego, se abren dos opciones. Una, con el anticiclón de Azores lo suficientemente al Oeste, como para permitir entradas de borrascas atlánticas de NW, tal y como apuesta ECMWF en sus últimas salidas.
La otra, supone que el de Azores se nos echa encima y las entradas de NW, apenas rozarían el norte de la Península.-
Tenemos servida otra batalla de modelos, dentro de una guerra que , de momento, gana GFS a tenor de los últimos acontecimientos.
A más largo plazo, sólo llega GFS. No es que nos guste a algunos mucho, es que es el único que alcanza a más de 240 horas. Ahí, sólo cabe ver tendencias y de nada sirve quedarse sólo en la salida oficial. Hay que tirar de diagramas y de ENS, para ver estas tendencias. En este sentido, cuano las líneas del meteograma van cinco por arriba de la media y otras tantas por debajo, no merece la pena hacer mucho caso. Pero hay ocasiones en las que se marca una tendencia y eso es algo más de tener en cuenta, sin tomarlo al pie de la letra.
Ahora mismo, hay una tendencia clara. Hace un par de días, GFS se dividía en dos posibilidades, una fría y otra cálida. Hace veinte días ocurrió lo mismo y se decantó por la fría. Y acertó.
Ahora se ha decantado por la cálida.
De los paneles ENS, casi han desaparecido las cuatro o cinco tendencias que hace unos días marcaban claras posibilidades de entradas de NE, e incluso siberianas.
Ahora, el protagonista es el anticiclón de Azores a medio plazo, alargado de O a E, y afectándonos éste último flanco, desviando todo hacia Italia. Puede verse como es una tendencia bastante unánime, a 240 horas.
Luego, la tendencia sería a subir de nuevo dicho anticiclón a latitudes superiores.
En el diagrama, se observa claramente esta tendencia.
Hasta el 7 de Febrero, temperaturas a 850 hpa, por debajo de la media, sin ser frías , apenas rozando la iso 0º y precipitaciones irregulares, más frecuentes en el Mediterráneo.
Luego marcan una clara tendencia a subir, entre el 8 y el 13, para volver a descender hacia esta última fecha. La tendencia a partir del 6 ó 7, a afectar las borrascas atlánticas, superando por el norte la barrera anticiclónica, se observa claramente, tanto en el aumento de temperaturas a 850 hpa, como en el diagrama de La Coruña.
De todas formas, tengo una especial habilidad en poner este tipo de mensajes, largos y con imágenes, justo cuando los modelos dan un vuelco, para bien o para mal.