HUESCA.- Un equipo de científicos de la Universidad de Lérida (UdL) ha descubierto una población de tritones única en el mundo en un ibón del Pirineo oscense, a 2.100 metros de altitud; se trata de un grupo del Calotriton asper, llamado popularmente tritón de los Pirineos, que ha evolucionado de forma diferente a otros individuos de su especie.

"Es un hallazgo muy importante para la comunidad científica", señala a este periódico el responsable del proyecto y profesor de la UdL, Delfí Sanuy, quien añade que, probablemente, es la única población de estas características del tritón pirenaico que hay en la actualidad.

Según sus estimaciones, el número de ejemplares podría ascender a 400, lo que despierta un gran interés tanto por parte de los naturalistas como por la de los coleccionistas, que podrían llegar a pagar hasta 30.000 euros por uno de estos ejemplares en el mercado negro, apunta Sanuy.

La principal peculiaridad de estos animales es que alcanzan la madurez sexual sin completar la metamorfosis morfológica, en su estado de larva, lo que científicamente se denomina neotenia.

Otra de sus características es que habitan siempre en el agua, aunque pueden salir por la noche para cazar y alimentarse, ya que disponen de branquias. Su aspecto es más esbelto que otros Calotriron asper y tienen la piel lisa. A pesar de su rápida maduración sexual, viven menos tiempo que sus congéneres, (una media de 10 años, por los 25 que alcanza habitualmente el tritón del Pirineo).

La población descubierta desciende de una especie que está en la categoría de casi amenazada, por ello, Sanuy insiste en la importancia de cuidar y velar por la supervivencia de estos animales. "Este hallazgo pone en evidencia la riqueza y biodiversidad de los valles pirenaicos, lo que nos obliga a ser consecuentes y responsables con el medio ambiente", afirma.

Para el profesor, las principales causas de la desaparición del tritón del Pirineo es la introducción de peces para la pesca deportiva y la contaminación que genera la presencia de turismo en los hábitats de estos animales. Junto a estos factores, la evolución del cambio climático y la falta de concienciación social podrían conducir a que la especie finalmente se extinguiera.

El proyecto, que se inició en el 2009, se está llevando a cabo a través de investigadores del departamento de Producción Animal de la Universidad de Lérida, que cuentan con el patrocinio del Programa de Biodiversidad de Endesa, y la colaboración del Instituto de Biología Evolutiva de Barcelona y el Museo de Ciencias Naturales de Granollers.

Hasta el momento, los científicos han analizado las características morfológicas, ecológicas y genéticas de esta población de tritones y han comprobado que su adaptación a unas condiciones de vida extremas los diferencia bastante de sus congéneres.

Al parecer, esta población de tritón del Pirineo se separó de su especie original hace unos 8.000 años, y desde entonces viven aislados en este ibón oscense sin que haya habido ningún cruce genético con la especie de la que descienden, "algo muy curioso ya que a penas los separan 500 metros", destaca Sanuy.

El siguiente paso de la investigación será prospectar toda la zona para continuar comparando esta población de tritones con otras próximas y para estudiar su proceso evolutivo.

Asimismo, la Universidad de Lérida está en contacto con la de Lieja, en Bélgica, para llevar a cabo un estudio más exhaustivo del hábitat que rodea a los tritones, y están estudiando la posibilidad de hacer una reserva genética en laboratorio para tener una población retén, por si finalmente la población que ahora vive en el ibón oscense desapareciera.

diariodelatoaragon.com

8.000 años aislados en el ibon.

  , es bueno que encuentren mas especies animales, ahora a intentar que no se extinga dicha especie