Yo, y lo digo por experiencia propia del ir y venir de los días, he caído por fin en la cuenta de que la intensidad del Foehn se acrecienta a medida que la humedad de las capas bajas y medias de la atmósfera se incrementa.
Aquí en el cantábrico oriental, cuando sopla viento sur (o SW) hay días que no se produce casi efecto Foehn, y suele ocurrir en días en los que ese flujo de sur es bastante seco. Sin embargo, cuando la masa de aire está cargada de humedad, la pérdida de humedad es casi total para cuando el aire llega al norte y aumento de temperatura asociado a la expansión adiabática del aire al descender la divisoria de aguas es brutal, no hay más que ver lo que ocurrió la semana: inundaciones en Galicia y noche cuasi-tropical en Bilbao (y de noche no hay recalentamiento del sol que me valga).
También he leído por ahí que alcanzar los 40ºC no es tan habitual en Bilbao pero sin ir muy lejos, pueblos del interior de Bizkaia y norte de Alava como Orozko o Llodio superaron los 40ºC en 2005 y en la ola de calor de 2003 se llegó a 43,5ºC en Sodupe (en la encartaciones)
Quizá la mayor intensidad del calor en Bilbao, también se deba al hecho de que la Cordillera Cantábrica tiene un extremo en Galicia y el otro en la zona de Cantabria bajando la cota en Euskadi para encadenar con los Piris. Está claro que parte del aire que ataca los dos sistemas montañosos los bordean pasando por Euskadi con un efecto de encauzamiento que también puede aumentar el efecto Foehn, no?