Norawenas a Madrí y los madrileños, era cuestión de tiempo que pudierais disfrutar con esto. Yo acabo se secarme la lagrimilla y os cuento que desde Mirasierra, norte de la capital, mis padres me cuentan que desde que yo era pequeño (hace tiempo ya...) no ven tanta nieve, las cuerdas de tender la ropa parecen maromas de barco, y la acumulación, cercana a los 20 cm. Los abetos inclinados por el peso de la nieve y mi padre grabando todo para que yo lo pueda disfrutar un día de estos.
De verdad que, más que nunca, echo de menos mi tierra...snif...snif...
...Pero me alegro enormemente por vosotros...
Este es el tipo de cosas que me hacen tener más ganas de volver que nunca.
Salud y cuidado con los resbalones...CH.