1) Algunos de los viejos cazadores y alimañeros de la Sanabria zamorana y la Cabrera, que aún desarrollaban sus actividades en el segundo tercio del siglo XX, llegaron a hablarme del oso como de una especie relativamente familiar (…) Con todo, lo cierto es que, durante los años de la postguerra española, fueron avistados algunos osos en ciertos puntos de la Cabrera leonesa (…) Según testimonios recogidos por José Piñeiro Maceiras y la misma asociación “Monte Irago” a la que aquél pertenece, hacia 1943 fue visto algún oso en la comarca antedicha, y, por mi parte, hace unos treinta años, obtuve diversa información al respecto, en la zona comprendida entre Castrillo de Cabrera, La Baña y Silván, donde me señalaron la presencia de osos hasta la década de 1960, si bien con carácter esporádico. Parece ser que, a lo largo de los últimos cincuenta años, un exiguo número de individuos ha permanecido afincado en el sector occidental de la Cabrera, con eventuales incursiones hacia Sanabria (Zamora) y alcanzando en alguna ocasión, el extremo occidental del valle donde se asienta el pueblo de Vega del Castillo, a unos cinco kilómetros de dicha localidad. Entre los años 1996 y 1999, la asociación “Monte Irago” y yo hemos comprobado la presencia de tres osos en las áreas que antes he mencionado. Y no sólo en ellas. El oso se mueve también por los Montes de León… Fuente: R. Grande del Brío, “Los últimos reductos del oso en el occidente castellano-leonés”, en Argutorio, número 4, enero de 2000, página 49.
2) OSO. Tenemos tres noticias de la especie en Sanabria: en 1991 se vieron huellas de dos osos en la nieve (uno grande y otro pequeño) en el término de Escuredo (Antonio Cornejo, com. per.); en 1997 aparecieron huellas evidentes de un oso en la cuerda de algún punto de la sierra de la Cabrera en el límite entre Zamora y León (José Piñeiro Maceiras, com. per.); en junio de 1998 parece ser que un ejemplar fue avistado (¿y fotografiado?) en la zona del puerto de La Canda en el límite entre Zamora y Orense, según el periódico La Opinión de Zamora (26 de junio de 1998) y otros testimonios… Fuente José Ignacio Regueras Grande, “Caza y pesca zamorana en 1850 y en la actualidad”, en Brigecio, Centro de Estudios Benaventanos Ledo del Pozo, CSIC, núm. 11, año 2001, pp. 185-186.
Existen más referencias, pero las expuestas son significativas, en cuanto fueron anteriores a la edición del libro El Oso Pardo en el Noroeste Peninsular en octubre de 2002.
Las cualidades profesionales de los autores mencionados son las siguientes: José Piñeiro (abogado y título de Máster en Ciencias Históricas); Guillermo Palomero (Presidente de la Fundación Oso Pardo); Manuel Martínez (biólogo); Ignacio Pérez (Ingeniero Superior de Montes); Javier Naves (Doctor en Biología); Ramón Grande (Doctor en Historia) y José I. Regueras (biólogo).
Fue, en realidad, la publicación de la monografía sobre el oso del Noroeste lo que desencadenó un desencuentro entre alguno de estos autores y la Junta de Castilla y León, el cual aún subsiste.