Qué barbaridad ese pedrisco.
Y sí, yo también opino que lo comido por lo servido, no soportamos temperaturas extremas en julio y agosto, pero a cambio septiembre y lo que llevamos de octubre está siendo verano. Minimas de 23ºC y máximas de 33ºC, no hay más que hablar.
Hace falta decir también que la última semana de agosto fue incluso fría relativamente.
Pero lo que me llama la atención es que ni siquiera a largo plazo se ve un refrescamiento claro, de hecho el GFS sigue marcando la iso +20 amenazando ahí bien cerquita del sureste.
24,8ºC ahora, 74%. Nubosidad a ratos.