Hay varios acuerdos en marcha:
1) Los países del tercer mundo que quieren seguir "prendidos a la teta" y que reclaman más dinero para sus elites gobernantes, mayormente antidemocráticas y corruptas.
2) Europa (casi entera), Inglaterra y Australia, cuyos gobiernos están decididos a hundir sus economías y a someterse a una gobernanza que imponga la pobreza.
3) Otros países más listos (China, Brasil, Canadá, Polonia, quizás pequeños esbozos tímidos en USA, y algunos otros) que tienen bien claro que todo el alarmismo del calentamiento global antropogénico no tiene bases reales, y que sí desean realmente crecer económicamente, para lo cual deberán explotar rápidamente sus recursos (especialmente los de gas y petróleo de esquisto) y ofrecer energía abundante y barata a sus ciudadadanos... que es, al fin y al cabo, la fuente misma del desarrollo y de la riqueza.
En fin. Kyoto se muere, afortunadamente. Algunos seguirán enarbolando su fantasma, es cierto, pero como sucede con los médiums y los espiritistas, solamente los más crédulos les seguirán haciendo caso.