Curioso lo de 2018, que lo considero el último gran invierno por su duración en términos generales por la península. Y el verano fuerte tardó en llegar hasta agosto aunque luego se prolongó duramente en septiembre incluido.
Sí, por ejemplo, en 2.018, cuanto más al Norte peor se comportaron los glaciares. Austria no lo está tanto, pero imagínate Noruega...
Pongo una comparativa para la nivométrica del Sonnblick: por ejemplo, decir que 2.017 (que fue un año horrible para Iberia) fue mejor año para este lugar que el 2.018. Sin embargo, 2.020 y 2.021 son muy parejos (en Iberia, 2.020 se portó decentemente, mientras que 2.021 fue pésimo).
Comparando más gráficas, decir que 2.014 fue el mejor año, con dos metros todavía de nieve en pleno Septiembre (bastante mejor que 2.013). En Iberia, 2.013 fue excepcional mientras que 2.014 fue bastante bueno.
Otro año muy malo fue el 2.015, muy semejante a este horrible 2.022 (en esto sí coincide con Iberia, pues tanto 2.015 como 2.022 han sido pésimos años para nuestros glaciares ibéricos).
Podemos deducir que cuando las borrascas pasan más bajas de lo normal, toda la fachada mediterránea y sus montañas se ven favorecidas, pero ya no tanto Centroeuropa. Quizás con el extremo occidental alpino (alpes de Francia y Suiza occidentales) haya más semejanza.
Y otra conclusión: cuando tenemos anticiclón de las Azores en Iberia (propio de "Niña"), tampoco se ve muy favorecido el occidente alpino, pero sí bastante más el extremo oriental (alpes austríacos incluídos), y, sobre todo, los Cárpatos (República Checa, Eslovaquia, Polonia, Rumania y norte de Bulgaria) y los Balcanes (particularmente hacia su extremo sureste, hacia Grecia y sur de Bulgaria).