Si el paisaje ya es semiárido es probablemente porque ha tenido que sufrir mucho estrés hídrico desde siempre. Si no hay encinas también significa que no tiene lluvias regulares, es decir, que quizás sea una gran sequía y síntoma de los inicios de un cambio climático, pero tampoco está tan lejos del clima en el pasado
Te equivocas, el paisaje es semiárido (por ejemplo en Buñol-Chiva) porque la zona ha sufrido 4 grandes incendios desde 1994 hasta hoy, y ha sufrido (y sufre) sobreexplotación de materiales para alimentar las industrias cementeras. Por ello la pérdida de suelo fértil ha sido brutal. Aparte, se ha producido una importante reducción de la media anual de precipitación debida en gran parte (y ya llevo diciéndolo desde que entro al foro desde el 2003 por lo menos), a la importante pérdida de masa arbórea en una extensión que ocupa prácticamente la mitad de toda la provincia de Valencia, a causa de los reiterados incendios desde finales de los 70.
Mi opinión es diferente: La superficie forestal en España no ha dejado de aumentar en los últimos años en España. La situación ahora es infinitamente mejor que después de la Guerra Civil, cuando todo lo que se necesitaba se extraía del monte: leña para calentarse y cocinar, madera para hacer muebles, comida para el ganado, etc. Y, sin embargo, ahora no llueve más, teniendo en España muchos más bosques que hace 50 años.
http://sociedad.elpais.com/sociedad/2011/04/15/actualidad/1302818407_850215.htmlEspaña es el cuarto país con más extensión forestal de Europa y donde más ha aumentado la superficie verde en los últimos años. El panorama para el próximo medio siglo es esperanzador
En cuanto a la fertilidad del suelo, pues no creo que se haya podido perder mucho teniendo en cuenta que la fertilidad del suelo en toda la zona mediterránea desapareció hace ya unos miles de años. Los suelos de la cuenca mediterránea española se perdieron para siempre con la aparición de la metalurgia, la agricultura y la ganadería hace entre 4.000 y 3.000 años, y ya son irrecuperables.
Pues que el clima está cambiando. Pese a que se pusieron datos de sequías anteriores muy fuertes desde el Siglo XIX, yo ahora mismo dudo que un pino carrasco o una encina pudiera sobrevivir a estas sequías y altas temperaturas de los últimos 30 años en el entorno de Cabo de Gata.
Lo que ha cambiado en el Cabo de Gata, y en general en todo el sureste y Levante, no es el clima sino las condiciones ecológicas por la acción humana desde hace 4.000 años. Cuando desaparece la cobertura vegetal que protege el suelo, las condiciones ecológicas cambian y ya no son recuperables. Muchos de los fértiles suelos que cubrían nuestras tierras se habían generado durante el último periodo glaciar, y permitían la existencia de bosques con encinas, quejigos, brezos, nogales, donde ahora sólo crecen el esparto y el romero. Esos suelos se han perdido para siempre (hasta la próxima glaciación).
Te recomiendo vivamente un libro apasionante que explica cómo hemos llegado a la situación actual en el sureste debido a la sobreexplotación del medio natural, se trata del libro escrito por los hermanos Latorre 'Almería hecha a mano, una historia ecológica'.
Lo tienes disponible aquí :
http://www.publicacionescajamar.es/series-tematicas/sociedad/almeria-hecha-a-mano-una-historia-ecologica/Otro libro también apasionante sobre el mismo tema, la deforestación en el sureste por causas humanas: 'Cómo se construye un desierto. Aprovechamientos tradicionales de los montes en la comarca del Campo de Cartagena', de M.Carmen Zamora. No está disponible en internet, pero sí hay algunos extractos colgados por la red que se pueden consultar.
El fuego es parte de nuestro ecosistema, y nos guste o no, volvera. Aunque nos quedemos todos en casa, el estado en general de los bosques valencianos es tan lamentable que los grandes incendios son inevitables. Da igual cuanto gastemos, tenemos zonas de pinares, encima en mal estado, temperaturas altas en verano, con monte seco, dias de aire, y eso implica fuego. Podremos apagar unos cuantos pero la banca siempre ganara. Siempre acabara por caer un rayo antes de un dia de poniente y a tomar por saco.
No necesitamos mas medios para apagarlos (los grandes incendios casi nunca se pueden apagar mientras quede sierra para quemar o no cambien las condiciones meteorologicas). Necesitamos un cambio de mentalidad radical, aceptarlo, entenderlo, y prepararnos (y a nuestros montes) para convivir con el. Con menos dinero invertido en cualquier epoca del año que no sea verano nos iria mucho mejor, pero eso no vende. La cuestion no es evitar el fuego que es algo imposible, sino su frecuencia y su intensidad.
Completamente de acuerdo con el comentario anterior, especialmente por lo referido al lamentable estado de los bosques valencianos. Si queremos empezar a minimizar los efectos de los fuegos, habría que comenzar a eliminar densidades de pinos y sustituirlos por un bosque mixto que es lo que corresponde a muchos montes valencianos. En algunos casos, como el que se ha puesto antes de Orihuela, lo que procedería es la eliminación completa de la pinada, de esta manera la vegetación originaria de esos montes tendría una oportunidad de recuperar el espacio perdido (por cierto, una vegetación totalmente adaptada a estas sequías y rebrotadora tras los incendios).
La prueba de que ese bosque de Orihuela es un error está aquí. Los orovales no crecen bajo los pinos, así que aquí hay algo que está mal, o sobran los pinos o sobran los orovales. Evidentemente, lo que ha sido plantado son los pinos, luego el que está en su sitio, malviviendo, es el oroval.
Si se eliminaran esos pinos, los orovales podrían recuperar el terreno perdido. Un ejemplo fotográfico de cómo podría ser ese monte de Orihuela originalmente, una maquia de orovales y esparragueras en la Isla Grosa, en la Región de Murcia.
La fotografía es de hace menos de 20 días y se aprecia cómo, con la misma sequía que en Orihuela, el estado general del ecosistema es mucho más sano y resistente a la falta de agua, además de estar lleno de vida, al contrario que la pinada, que es un cementerio.
Por cierto, y aunque no sea un concepto ecológico, a mi me parece mucho más bonito un ecosistema como este último.