AFECTACIONES DE KARL EN VERACRUZ
Veracruz.- Tramos carreteros destruidos en Misantla y Martínez de la Torre, cortes de energía eléctrica en más de 30 municipios veracruzanos, suspensión de los servicios telefónicos, árboles arrancados de raíz, vientos violentos que superaron los 185 kilómetros por hora a las 11:30 que Karl entró a Veracruz, es el saldo del huracán a su paso por territorio veracruzano.
El meteoro que entró con categoría tres y avanzó con categoría dos a la zona montañosa, obligó a la suspensión de la actividad en la planta nuclear de Laguna Verde, la evacuación de los habitantes y turistas que se encontraban por el puente vacacional en los hoteles y comunidades de los municipios de Úrsulo Galván, Actopan, Alto Lucero y Costa Esmeralda donde Karl ocasionó severos estragos entre la población y la actividad económica que prácticamente quedó suspendida, desde Boca del Río hasta Nautla.
Las palapas de las playas de Chachalacas y parte de Costa Esmeralda quedaron semi-sepultadas por la fuerte marejada.
La secretaria de Protección Civil del Gobierno Estatal, Silvia Domínguez López, señaló que más de mil 500 personas fueron trasladadas a algunos de los 120 albergues activados de Cardel, Úrsulo Galván, Tecolutla, Veracruz y Xalapa, pues el fenómeno se dirigió hacia la zona montañosa entre Orizaba y Xalapa con categoría dos.
Las cuencas de los ríos Actopan, Tuxpan, Pánuco, Misantla, Tecolutla crecieron por las intensas lluvias, especialmente Misantla que empezó a desbordar desde el mediodía, provocando inundaciones en las comunidades bajas asentadas en sus márgenes.
En la zona conurbada Veracruz-Boca del Río los semáforos volaron mientras las calles permanecían inundadas, aún después del paso del huracán.
Los reportes de y llamadas de auxilio se multiplicaron, ante la cantidad de fugas de gas, palmeras, árboles, anuncios espectaculares derribados por el huracán.
En el puerto un pescador resultó severamente herido al intentar asegurar su lancha en el muelle de pescadores aledaño a la escuela Náutica Mercante.
Desde el mar, piedras de gran tamaño salían volando como peligrosos proyectiles.
El espectáculo de la furia de Karl fue increíble, y a pesar de que en Veracruz estamos acostumbrados a vientos fuertes de hasta 160 kilómetros por hora, nunca habíamos vivido un huracán con vientos de más de 185 kilómetros por hora.
En las zonas serranas hubo deslaves que afectaron caminos y las lluvias desbordaron algunos arroyos de la sierra de Misantla y Zongolica.
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