Muchas gracias, majos. La verdad es que es algo difícil de explicar, el llegar allí, conseguir ese objetivo después de años de preparación y escaladas por todo el mundo.
Respecto a bajar, así es, es lo más difícil, pero por la general bajamos rapelando con cuerda las zonas más verticales. En esta ocasión, y en la última parte de la montaña, al no haber llegado nadie no había cuerdas fijas así que a destrepar de cara a la pendiente metiendo pilotazos y pensando, "note caigas aquí, tío... Aguanta".
Y claro, sin oxígeno artificial, bajo los efectos de la hipoxia (que es lo que le da gracia al asunto, jsjs)
Lo de la arista, sí, a la derecha había 3.000 m de caída, y la izquierda, unos 2.000 m. Equipamos la arista con una cuerda súper ligera y varias estacas de nieve que porteamos para asegurar la travesía.
Son montañas colosales, y por ende, colosales las condiciones meteorológicas. Una experiencia como pocas tendré en mi vida, aunque pienso seguir, jsjs. Ahora se me ocurre cruzar a pata el Gobi, así que si en breve me da por ahí, os lo enseño! jsjs
Un abrazo a todos.