Los modelos confirman el fuerte desalojo frío en gran parte de Europa.
Situación extraordinaria, que posiblemente formará parte de las efemérides meteorológicas futuras del viejo continente.
Sin embargo, España queda un poco al margen de esta situación extraordinaria.
Como puede observarse en una de las imágenes que adjunto, actualmente y según GFS, 7 de 20 escenarios indican isotermas a 850 hpa por debajo de -10 en un punto del Pais Vasco, entre los días 3 y 7 de febrero.
La proporción es muy buena, va en aumento en cada salida y la media de escenarios también mejora cada vez, pero indudablemente son extremos más suaves que los previstos para los países por encima de los Pirineos.
Como es lógico por nuestra situación geográfica tan al sur y al oeste, la lengua de aire siberiana llegaría con toda su fuerza hasta la barrera orográfica de los Pirineos, pero está por ver con qué intensidad la rebasa.
Probablemente la incidencia sea sensiblemente menor que en el sur de Francia, sin ir más lejos.
Quizás hasta dos días antes del desalojo no sepamos en qué medida nos va a afectar.
Como buen amante del frío, lo que me hace ser optimista son las extraordinarias dimensiones de esa masa gélida y los impresionantes 1060 mb del centro bombeador de dicha masa.
Como siempre en estas situaciones tan complejas de modelizar, la incidencia final se decidirá por detalles.
Mi modesta opinión es que hasta el día 3, la lengua de aire polar, y me refiero a la barrera de la isoterma -10 a 850 hpa, penetrará ligeramente en cantábrico oriental, Alto Ebro, norte de Aragón, Cataluña y Baleares. Sería muy seca y por tanto las nevadas serían escasas salvo quizás en Cataluña, Baleares y Pais Vasco.
Eso sí el frío sería importante en prácticamente toda la península;menos evidente en el suroeste.
Pero uno de esos detalles a los que me refería antes, aparece en la salida determinista del GFS a partir de 156 horas. Está muy lejos en el tiempo, pero creo que merece la pena analizarlo, ya que en estas situaciones de potente bloqueo anticiclónico, la ruptura puede adelantarse o retrasarse en el tiempo.
Sigo pensando que una pequeña baja atlántica con cierto reflejo en altura, 'se colará' dentro del bloqueo anticiclónico sobre el territorio peninsular, provocando:
1. Inestabilización de la atmósfera en capas altas, que traerá chubascos irregulares sobre gran parte del territorio
2. Efecto atractor sobre la gélida masa de aire que en ese momento abrazaría el norte de Francia, Paises Bajos,...
Las consecuencias serían un próximo fin de semana, 4/5 de febrero, movidito movidito.
Es sólo una posibilidad, pero es factible, y en ello confío para poder ver nevadas importantes en nuestro país.
Saludos.