Por lo que leo por aquí estos días, las nevadas que se van a dar en todo el área cantábrica martes, miércoles y jueves hasta mediodía van a sorprender a más de uno.
Ya he analizado en este foro dos nevadas de frente cálido en los últimos años.
La del 27 al 28 de febrero de 2018 y la asociada al evento Filomena.
Pues bien, en esta ocasión estamos ante una nevada de frente frío, una nortada de las de toda la vida.
En mis posteos de estos días anteriores ya incidí en la importancia que va a tener en este episodio un mar Cantábrico con anomalía de temperatura ligeramente positiva.
Actualmente la temperatura del agua oscila entre 13,5 °C y 14 °C que en apariencia no es cálida, pero si tenemos en cuenta que en la vertical del Cantábrico penetrará una masa de aire procedente del Ártico con -36 por debajo de 5300 m, esto ya nos dá una idea del gradiente térmico vertical que tendremos esos días y de los intensos movimientos de aire que se darán en la vertical.
Tras el paso del gran frente frío que separa las dos masas de aire, se irán generando nuevos frentes muy activos por detrás con igualmente mucha actividad convectiva.
Pues bien cuando estos frentes y esta nubosidad de desarrollo postfrontal descargue, lo hará con gran virulencia provocando desplomes de la cota de nieve.
Por supuesto cerca de la costa, tormentas con granizo y viento racheado imponentes.
Estos desplomes pueden ser del orden de 200/300 metros, al registrarse caídas de la temperatura en momentos de precipitación intensa del orden de 2°C.
Hablando en plata, si en ese momento en Oviedo la cota de nieve está en 400 m., en el momento de chubasco intenso(los que hemos vivido allí sabemos cómo se oscurece y se cierra el cielo en el Naranco en esos momentos) la cota puede caer hasta 100 metros y cuajar la nevada con alegría en las calles de la capital asturiana.
Y no, en mi opinión no sería nieve tan húmeda, sería lo suficientemente seca como para cubrir el suelo en pocos minutos.
Ayudará que los chubascos se den de madrugada o primeras horas de la mañana de miércoles y/o jueves con temperatura previa ya baja.
También ayudaría a cuajar bien la nevada, que previamente se dé un chubasco mix intenso de granizo/nieve granulada y cubra parcialmente el suelo.
Debido a que serán nevadas de duración limitada y la temperatura difícilmente bajará de cero grados, calculo que los espesores máximos rondarán los 5/6/7 cm en la ciudad.
En las cuencas mineras si puede subir bastante el espesor de la nevada.
Por supuesto, este ejemplo es aplicable a otras poblaciones de todo el área cantábrica situadas ligeramente al interior en altitudes entre 100 y 300 msnm.
Después que nadie diga que ha habido desplomes de la cota imprevistos, porque aquí queda escrito.
En ciudades como Vitoria y Pamplona la nevada será de las que marcan una efeméride...no de las grandes, pero si señaladas.
El espesor máximo puede oscilar entre 15 cm y 20 cm dependiendo de lo efectivos que resulten los chubascos nivosos.
Son detalles que afinarán los modelos mesoescalares.
Saludos nocturnos