Lo que comentais no explica a la totalidad el origen de lo que realmente ocurrió, pues los vientos estaban a mucha altura, sobre los 3000 metros y la isla no llega a esa altura ni de coña. Algo hizo que los vientos se desplomaran hacia la isla y acabase ocurriendo lo que comentais el efecto foehn.
Parece ser que el fenómeno se debió a la ruptura de la capa estratificada típica de canarias. Aquí os dejo lo que comentan los meteorólogos:
Los meteorólogos están recabando todos los datos para tratar de conocer lo que sucedió el jueves en Gran Canaria, un episodio que ha sido calificado como «inusual». Estaba previsto que en Canarias hubiera fuertes vientos, pero se situaban por encima de 3.000 metros. Los expertos contemplaban rachas de hasta 40 kilómetros en medianías y de menos todavía en la costa. Sin embargo, lo que ocurrió fue bien distinto:los vientos fuertes llegaron al nivel del mar e hicieron que en puntos como en San Cristóbal, en la capital grancanaria, se registraran rachas de 90 kilómetros por hora. Por el momento, lo que se sabe es que el viento fuerte que había en altura se desplomó hasta la costa. Y poco más. Los meteorólogos tratan de saber algo más del fenómeno al que dan, como primera explicación, la ruptura de la estratificación de la atmósfera típica de Canarias, es decir, de la disposición de diferentes capas de aire -la húmeda debajo y la seca en altura- que suele traer el alisio. Pero el fenómeno se complicó en Gran Canaria. Esta isla fue la más afectada por los fuertes vientos porque sobre ella se produjo una convergencia de vientos en altura que luego cayeron a tierra. Y además, el fenómeno se agudizó por la orografía insular. Los vientos que llegaron del suroeste empezaron a ascender pegados al suelo hasta alcanzar la cumbre.
Luego cayeron en picado y se aceleraron, lo que les hizo bajar más calientes y secos, disparando los termómetros entre 3 y 4 grados por encima de la temperatura ambiente. Eso provocó la sensación de bochorno y elevó las temperaturas hasta los 32 grados en la capital. Jesús Agüera, de Aemet, reconoció que «en superficie no fuimos capaces de prever el viento tan fuerte y cuando vimos las rachas fuertes en superficie, dimos el aviso; sé que fue tarde pero estamos recogiendo toda la información y vamos a estudiar el fenómeno».
Parece ser que en algunos lados de la isla de gran canaria se registraron cantidades de precipitación interesante:
Cabe destacar esos 75,7 litros en agaete: