En el momento de máxima intensidad (radar de las 00:50 h) me parece que se han alcanzado los 66 dbz, que me han pasado por encima.
La verdad, qué lástima de no tener una cámara de video, para que viérais lo atronador de un pedrisco así, porque lo espectacular ha sido la intensidad tan brutal de algunos instantes, pero solo duraba unos 10 segundos.