En vista de los datos que tenemos cuatro años después creo que podríamos elaborar alguna teoría al hilo de este tópic ( que lo he renombrado para adecuarlo a la temática real que se ha discutido ).
Este invierno, coincidiendo con el mínimo solar mas intenso de los últimos 100 años, ha mostrado una atmósfera bastante distinta de la observada otros años : la AO se ha desplomado hacia unos registros históricos y, como consecuencia, la cubierta de nieve ha crecido hasta alcanzar, también, mediciones históricas ( véase el norte de china donde solo este mes de Enero se ha acumulado más nieve de la que lo ha hecho los últimos 10 eneros anteriores)
A raíz o al rededor de todo ello han surgido teorías y especulaciones sobre variaciones a más largo plazo de la actividad solar ( las manchas podrían desaparecer en el siguiente ciclo solar ).
Por tanto, tendríamos algunos factores novedosos de los que en 2004 apenas sabíamos nada :
1) Los resultados de ciertas investigaciones muestran una pérdida de intensidad de las manchas solares.
2) Estos estudios parecen confirmarse al encontrarnos, sorpresivamente, ante el mínimo mas profundo de los últimos 100 años.
3) El mínimo solar parece tener relación con los cambios en la circulación atmosférica y que llevan a una bilocación o desplazamiento mucho más acentuadas y persistentes.
4) Estos cambios hacen descender la trayectoria del jet así como las depresiones que se forman en su proximidad.
5) Finalmente, una mayor redistribución del aire frió provoca potentes Anticiclones Polares Móviles que hacen crecer la cubierta de nieve, ( sin olvidarnos, tampoco, de la nubosidad )
Es evidente que estos fenómenos ( al menos los pertenecientes a la Tierra, claro ) se re-alimentan entre si acelerando un ajuste de la temperatura.
Obviamente, este ajuste es pequeño comparado con la inercia oceánica y, por tanto, difícil de cuantificar a día de hoy.
Bien. ¿cual es el escenario que estoy pintando?.
Suponiendo que realmente todo lo anterior fuera cierto, entonces si el sol continuara con la pérdida de actividad y entráramos en un mínimo acusado, entonces deberíamos ver un escenario de circulación parecido a este invierno pero con más asiduidad. Eso incrementaría la cobertura nivosa especialmente en otoño y primavera. Así, el albedo crecería. La nieve, poco a poco ( en algunos cientos de años, quizás) podría cubrir parte de las zonas subpolares mucho mas tiempo de lo que hace ahora iniciándose una re-alimentación que llevaría a la atmósfera terrestre hacia un enfriamiento global paulatino.
¿Y donde queda la teoría orbital?
Pues como un factor más que modifica la intensidad de la oscilación en determinados períodos.
Así, el tránsito hacia la fase fría de daría con el primero de los mínimos duraderos, o sea, ahora mismo.
Bien, es una especulación, claro, pero suficientemente lógica como para poder creérmela en un sentido más potencial que de fe.
A ello contribuiría un hecho :
éstos últimos años han visto como han retornado episodios extremos que hacía 70 u 80 años que no ocurrían. Esto indicaría que la dirección de las fuerzas climáticas subyacentes ya hace algunos años que ya se ha invertido.
Esto no se aprecia en el comportamiento a corto plazo de la temperatura, sino es en el estancamiento que hemos podido corroborar los últimos años. Pero para mi está claro que ya hay fuerzas actuando en esta nueva dirección mientras muchos se empeñan, todavía, en ver un futuro de calor gracias al salto en el vacio que supone extrapolar los efectos del CO2 en el laboratorio al sistema climático.
Efectivamente y a excepción de que el futuro me desdiga, veo un escenario que bien podría llevarnos a la nueva era glacial ( claro, no en 2010 ) en unos cientos de años.
Me juego 200 paellas de la otra vida ( en esta no llego ) a que el próximo milenio el hemisferio norte ya luce una buena capa de nieve.
Saludos