Ex-NOAA Climate Scientist: ‘No Role Of CO2 In Any Significant Change Of The Earth’s Climate’
“The results of this review point to the extreme value of CO2 to all life forms, but no role of CO2 in any significant change of the Earth’s climate. … There is no correlation of CO2 with temperature in any historical data set that was reviewed. The climate-change cooling over the 1940–1975 time period of the Modern Warming period was shown to be influenced by a combination of solar factors. The cause of the Medieval Warm Period and the Little Ice Age climate changes was the solar magnetic field and cosmic ray connection.
He leído casi todo el artículo y me confirma que la revisión por pares en una revista científica, aunque posiblemente el menos malo de los sistemas de revisión, está lejos de ser ideal. No entiendo como se ha podido publicar algo así, tal cual, sin objeciones serias de editores y revisores.
El objetivo del autor es claramente minimizar o directamente eliminar el papel del CO2 y otros GEI en la dinámica térmica
natural de la atmósfera, para disociar el calentamiento del último siglo de los GEI antropogénicos. Para ello usa varios pilares, algunos de los cuales me resultan inconcebibles, particularmente el segundo de los siguientes puntos:
- Emplea el manido argumento de que en los ciclos glaciales-interglaciales del Cuaternario, las variaciones de temperatura preceden a las del CO2 con una diferencia de cientos de años. Hay estudios modernos que muestran que tal diferencia no es tan amplia o ni siquiera existe. Y sabemos bastante bien que en estos ciclos primero se produce un cambio orbital (o del eje) que provoca una variación de temperatura que a su vez altera el balance de CO2 y este amplifica el cambio inicial. Incluso el autor revisa los episodios fríos o cálidos del Holoceno para señalar que se debieron a la actividad solar y que el CO2 no tuvo nada que ver, lo cual por si mismo no desacredita en absoluto el hecho de que si pueda causar otros como el actual.
- El efecto invernadero natural causado por GEI (ese que nos permite disfrutar de una temperatura media global de +15ºC y no de -18ºC) resulta que no es tal según el autor, sino que las favorables condiciones térmicas terrestres se deben fundamentalmente (>90%) a la transferencia de calor latente por condensación del vapor de agua formado por la acción de la radiación solar incidente en la superficie terrestre y movilizado en la atmósfera mediante convección. La contribución del forzamiento radiativo medio del CO2 y H2O (no habla de otros GEI) sería <9%. No niego el papel que el ciclo de cambios de estado del agua puede tener en la redistribución de energía en el sistema climático, pero de ahí a eliminar de un plumazo lo que está más que comprobado me parece un exceso. Además, entiendo que, el ciclo de vaporización y condensación lo que en todo caso hace es redistribuir la energía interna del sistema sin causar una variación neta en la cantidad de energía, a no ser que exista un factor externo (e.g. radiación solar) que provoque una variación de la temperatura. Y que yo sepa la actividad solar está en mínimos desde hace años y sin embargo el calentamiento global continúa. Solo el calor latente absorbido/cedido cientos de o miles de años antes si podría tener un efecto neto en el contenido energético presente. Precisamente, la fusión de hielo antiguo (terrestre o marino) provoca un enfriamiento por absorción de calor, pero tal efecto es insignificante en comparación con el calentamiento global (incluso sin contar con la reducción del albedo resultante).
- Realiza una serie de cálculos técnicos para concluir que la capacidad de del CO2 (y H2O) para causar un calentamiento por acumulación de energía es despreciable. Se basa en que, según la ecuación de Planck, la capacidad de absorción de radiación en las bandas del espectro donde el CO2 es activo se reduce rápidamente con la disminución de temperatura (altitud), en que la radiación infrarroja pierde intensidad rápidamente con la distancia, y que esa naturaleza difusa (balance "nulo" entre radiaciones emitidas en sentido opuestos) reduce la capacidad de absorción del CO2. No soy físico, pero creo que a estas alturas está relativamente bien asentado el forzamiento radiativo causado por el CO2 (y su feedback el vapor de agua) entorno a 1.6 W/m2, más otro 1.3 W/m2 neto del resto de GEI. Y que con esos valores la sensibilidad climática con la duplicación de la concentración de CO2 hasta 560 ppmv estaría entre +(1.5-2.5) ºC.
- Como según el autor los GEI no pueden causar cambios apreciables en las temperaturas globales, la hipótesis que maneja es la del efecto del campo magnético solar sobre la radiación cósmica y de esta sobre la formación de nubes. Se supone que los rayos cósmicos favorecen la formación de nubes, provocando un aumento del albedo y una reducción de la temperatura. Cuando la actividad solar es intensa el campo magnético del Sol se refuerza sobre la Tierra y actúa como un escudo que reduce la radiación cósmica y por tanto la formación de nubes (y viceversa). Algunos estudios apuntan a que puede existir un correlación causal entre radiación cósmica, formación de nubes y variaciones de la temperatura (aun en debate), pero igualmente indican que incluso siendo así no podrían explicar el reciente calentamiento, puesto que ambos parámetros siguen caminos opuestos: la intensidad del campo magnético se reduce, la radiación cósmica en la superficie terrestre aumenta y sin embargo la temperatura se incrementa (ver
http://www.pnas.org/content/112/11/3253):
https://www.skepticalscience.com/cosmic-rays-and-global-warming-intermediate.htmCuidado que la escala de la radiación cósmica está invertida, aumenta hacia abajo para que visualmente la asociación temperatura y calentamiento por reducción de radiación cósmica sea paralela (y lo contrario).
Todo esto para acabar rematando su argumentación en el sumario final con la predicción de que el calentamiento actual debería continuar hasta que se reduzca la intensidad del campo magnético solar y que para 2030 debería tener lugar una gran Mínimo Solar
¡Ojo que este "artículo" es de este año 2018! Este señor no debe estar muy atento a los datos de actividad solar e índices del campo magnético solar de los últimas décadas. Según sus propios razonamiento la temperatura ya debería llevar tendencia decreciente desde hace años, justo lo contrario que observamos. Por supuesto, termina el texto alabando las bondades del CO2 y culmina con una última frase que debe ser recochineo después de infravalorar repetidamente la capacidad de efecto invernadero del CO2: "
Any greater CO2 resource in the future will prove valuable when the Earth cools again"
De verdad que no entiendo como se puede dar el visto bueno a un manuscrito como este, ni si quiera aunque la revista tenga un factor de impacto "bajo" (1.57) o no publique habitualmente sobre Cambio Climático (publica básicamente impacto de actividades extractivas, minería, suelos, y demás).