Por alusiones, decir que he vivido 6 años en Murcia (paradigma de ciudad húmeda y más fría en invierno que otras costeras) y he pasado largas temporadas en Valencia. Por descontado, cualquier parecido con alguna ciudad del interior es pura coincidencia.
Ahora bien, en Murcia, casi ningún piso construido hace más de 15 años tiene calefacción, las ventanas no cierran bien y entra el aire...eso en mi pueblo no ocurre. Conclusión: en las ciudades costeras, las viviendas no están preparadas para las bajas temperaturas. He pasado más frío en el interior de la vivienda en Murcia que en mi propia ciudad, pero levantarte una mañana de invierno y salir a la calle con 7-8 ºC es un lujo para una ciudad situada en el paraleo 38.
Lo dicho, en mi opinión hay mucho de factor psicológico.