Volviendo al tema de la sequía, para aquellos que siguen creyendo que lo que pasa en “su pueblo” es lo más importante del mundo mundial, que es lo más grave que ha ocurrido nunca en la historia, que es la prueba irrefutable del cambio climático y del supercalentamiento global, para esos le dejo algo de perspectiva…
Me ha bastado hacer una pequeña búsqueda en Google, partiendo del recuerdo de algo que leí sobre sequías en tiempos de los árabes en España: “Sequías en Al Andalus” y así, a bote pronto me ha salido todo esto.
Recomiendo la lectura del último párrafo dedicado a sequías históricas.
“Al-Andalus conoció años de espléndidas cosechas y años en los que, por el contrario, apenas se recogía nada de la tierra sembrada, todo debido a la pertinaz sequía.
Por ejemplo en la primavera de 915 al-Andalus padeció una atroz sequía, de la que derivó inmediatamente la aparición del hambre y de la peste y que se mantuvieron su vigencia durante cerca de un año. Las epidemias se cebaron en los pobres y resulto imposible enterrar a todos los muertos.
El emir Abderraman III y sus consejeros se vieron obligados a conceder numerosas limosnas para socorrer a los mas necesitados. Hubo una nueva sequía en el año 936. En aquel año hubo en todo al-Andalus una sequía como jamás se había conocido ni oído de tan pertinaz, pues se prolongo durante el año, sin caer ni una gota. De todos modos las consecuencias de esa tremenda sequía fueron mínimas. En la década de los cuarenta reapareció la sequía en varias ocasiones.”
http://www.google.es/url?sa=t&rct=j&q=&esrc=s&source=web&cd=3&cad=rja&uact=8&sqi=2&ved=0CEIQFjAC&url=http%3A%2F%2Fwww.mundohistoria.org%2Fblog%2Farticulos_web%2Fla-agricultura-al-andalus&ei=KXJrU-myDvSjsQSO5IEw&usg=AFQjCNGuxJKz8IaetntCFuJW4oqYrMcKbg&sig2=TFdPBuNDTL8lhP0iVvaoHASequías en tiempo de Yusuf, años 748 a 750 La conquista de Al-Andalus
Breves apuntes históricos de la sequía en España
“…Durante el califato de Abderramán III, el territorio de Al-Andalus sufrió los rigores de la escasez de agua tal y como nos lo relata Ibn Hayyán en el Muqtabas V . Según este relato, en la segunda mitad del año 941 Córdoba y sus alquerías ven secarse sus aljibes y sus campos circundantes son totalmente estériles lo cual propició que el cadí (sacerdote musulmán) tuviera que realizar plegarias por lluvia durante casi dos meses…”
“…Así mismo, son innumerables las rogativas pro pluvia recogidas en los archivos diocesanos de Tortosa, Barcelona o Urgel con las cuales se intentaba poner freno a una terrible sequía entre 1567 y 1568. Algunas crónicas locales corroboran este hecho ya que nos mencionan un descenso de los niveles de los ríos tan brusco que las aceñas (molinos hidraúlicos) tuvieron graves problemas de funcionamiento en todas estas comarcas…”
“…Los inviernos de 1603-04 y 1604-05 fueron bastante secos en gran parte de la geografía peninsular…”
“…Ahora bien, esta crisis con toda su espectacularidad, fue ampliamente superada por la de 1616-1617 que cabe inscribir en un período generalizado de sequía. En abril de 1616, se realizaron rogativas a la Virgen del Prado con el objeto de procurar la lluvia. La cosecha de 1616 fue la más baja de los tiempos modernos; un 90 por 100 inferior respecto a la media de 1592-1604…”
“…existe un descenso brusco de las precipitaciones entre 1868 y 1869 que puede inscribirse a un periodo generalizado de sequía en toda nuestra geografía ya que Font Tullot en su trabajo Historia del clima también registra terribles sequías en la Meseta Norte en 1869, con especial incidencia en las provincias de Zamora y Valladolid. No obstante en 1874 se vuelve a repetir este fenómeno incidiendo principalmente en el sur y en la costa levantina…”
“…La España del siglo XX también sufrió con mayor insistencia si cabe los rigores de este fenómeno. Una terrible sequía se produjo en 1930…”
Extractos de Periodos Secos en Aragón:
“En los momentos actuales se dice que la que ahora padecemos es la sequía del siglo. A nuestro modo de ver, y por cuanto llevamos dicho, no existen elementos con los que juzgar si es más o menos severa que otras de antaño-
Existen numerosos acontecimientos que parece pudieran ser indicadores para establecer una comparación, pero vamos a ver seguidamente que no es así. Las necesidades actuales de agua son muy superiores a las de algunas décadas atrás, y ello por diversos motivos: El incremento de la población, las demandas de la industria, la ampliación e intensificación de los regadíos, el incremento de la cabaña, la importancia creciente de zonas verdes urbanas, el desarrollo de una higiene humana, etc. son algunos de los numerosos motivos que podrían aportarse. La sociedad de hace unas décadas tenía necesidades más simples que ésta. El lavadero era público, la fuente suministraba agua potable, puesto que la higiene doméstica estaba todavía muy simplificada, la industria no se había desarrollado e incluso existía un aprovechamiento sencillo y rudimentario para extraer la energía de los cauces de agua, como eran los molinos y las fábricas de luz, etc…”
Sequías históricas: “Como decíamos al principio estas tierras del centro de la depresión del Ebro han estado marcadas siempre por el signo de la sequía. Desde la más remota antigüedad podemos encontrar referencias a la falta de agua.
En 1442 y durante el reinado del rey Sejonj se establece una red para la medida de las precipitaciones en China, India, Corea y Palestina mediante unos pluviómetros muy sencillos y elementales. Pero el reconocimiento oficial de la invención del pluviómetro se atribuye a Castelli, discípulo de Galileo, en 1639.
Aunque los primeros datos meteorológicos se inician en el siglo XVIII no es hasta mediados del XIX cuando se establecen oficialmente en España. Por consiguiente para hacer un análisis retrospectivo de las sequías tenemos que recurrir a otras fuentes como son las reseñas históricas que aparecen en diversas obras. Referiremos a continuación aquellas sequías generales y que consecuentemente afectaron a la depresión del Ebro y aquellas otras específicas y concretas referidas a este entorno.
La primera conocida, de carácter general, es la que, según Diodoro Sículo, se produjo en el año 2030 a. de J.C. que provocó la despoblación de España. Otra de análogas características debió ser la de 1059 a. de J.C.. Según Méndez Silva, entre el 957 y el 930 a. de J.C. se produjo una emigración de los pobladores de la Península hacia las zonas de lo que hoy denominamos España húmeda, a causa de la falta de lluvias. Otras fechas señaladas son el 224 y el 200 a. de J.C. Tanto Estrabón (siglo 1 a. de J. C.) como Mela (siglo 1) reconocen que en España existía una penuria de agua.
En el l410 una gran sequía afecta a España y otras, referidas por Puig, se produjeron entre el 707 y el 109 de modo que la población se redujo a la mitad debido a la mortalidad existente. Un nuevo período seco importante y general se presentó entre el 750 y 755 pero más grave fue el que se inició en el 846, con una duración de 31 años, y cuya crisis más fuerte fue en el año 873 secándose las fuentes, faltando los cereales, perdiéndose vides y frutales y muriendo el ganado a falta de poder abrevarle.
A excepción del 980 y del 1172 en que se conoce hubo sequías generales no hay otra hasta 1219 que quedó registrada en los Anales de Zurita y que afectó, incluso, a las zonas de montaña. Otras generales del siglo XIII tuvieron lugar en los años 1255 y 1262…”
http://hispagua.cedex.es/sites/default/files/especiales/sequia/historia.htm